Ni soldadito, ni marinero, a decir verdad.
Con los pies en el suelo y la mente… la mente es otra cosa. Supongo que como todos los que escribimos, me gusta dejar volar la imaginación.
Soñar despierto.
Porque si hay algo que no tiene límites (y pocas cosas no los tienen) es la imaginación. Porque nos hace libres, porque nos permite vivir otras vidas y no limitarnos a la que única que nos ha tocado.
Sentir nuestras vidas no materializadas, aunque sea en un sueño.
Así que ése es el objetivo de este blog, levar el ancla de mi mente para alcanzar otros mundos posibles, pensamientos rescatados del desván de mi memoria y, sobre todo, de mi imaginación.
Por lo demás, Madrid e Ingeniero, porque las letras no están reñidas con los números. Al menos en mi caso es más bien al contrario. Se cogen de la mano.
Y poco más que decir. Lo demás lo encontraréis en estas páginas que os escribo.
Porque antes de terminar quiero agradecerte a ti, protagonista verdadero de este blog, que estés aquí. Porque tú eres el que da sentido a lo que escribo. Sin ti, no soy nada.
Espero que en mis letras encuentres consuelo, inspiración, motivación o simplemente entretenimiento. Lo que sea. Lo que busques.
Pero algo.
Porque ahora ya tenemos un vínculo secreto. El que se forma entre escritor y lector por el simple hecho de leer las líneas que escribo para ti.
En alguna parte —eso es lo impresionante de este oficio— un desconocido nos leerá con increíble atención y esperará años antes de dirigirse a nosotros
Dietario voluble, Enrique Vila-Matas
Pues espero que tú no tardes años en dirigirte a mí. Porque tu aliento es mi gasolina para seguir escribiendo y, si lo haces, te aseguro que tu comentario no caerá en saco roto. Porque el hecho de que tú estés ahí, de que estas letras marquen aunque sea una ínfima diferencia en el curso de tu vida, es lo que establece nuestro vínculo secreto.
Porque es el privilegio que me otorgas.
Privilegio y responsabilidad.
Porque me haces formar parte de tu vida.
Gracias por dejar que forme parte de tu vida
Soldadito Marinero
soldaditom@gmail.com
