Somos como bloques de piedra a partir de los cuáles el escultor forma la figura humana. Los golpes de su cincel, que nos hacen tanto daño, nos hacen también perfectos.
Tierras de Penumbra (1993)
Amiga mía,
Se ha ido y seguramente no vuelva.
Así que me pregunto qué decirte para que puedas encontrar consuelo o ilusión en mis palabras. Difícil acertar. Seguramente sea verdad que sólo el tiempo lo puede curar.
Pero yo voy a intentarlo.
Voy a intentarlo porque tú me enseñaste a luchar por las causas perdidas. A no dar el partido por perdido hasta el final. A buscar hasta encontrar.
Y no voy a entrar en los tópicos de “él ha perdido más que tú dejándote marchar”, “hay muchos peces en el mar” o “mejor que te deje ahora que no demasiado tarde” Honestamente, eso son tiritas. Eso se lo podría decir a cualquiera.
A ti no.
Porque contigo, que él pierde más es demasiado evidente hasta para decirlo, y eso que ni le conozco. Contigo todos perdemos. Y todos, es todos.
Que hay más peces en el mar es verdad, pero eso ahora no te servirá de nada. Además, tú eras más de ríos estrechos. Más de calidad que de cantidad.
Y ahora sólo hay hueco para pensar en el que se ha ido, sobrevalorado por la añoranza, porque sólo te acuerdas de lo bueno. Pero ya trabajaremos eso.
Y eso de que mejor que te haya dejado cuanto antes es un argumento tramposo. Nunca me han explicado cuándo es “demasiado tarde”. Y tú nunca fuiste chica de excusas fáciles.
Así que tengo que recurrir a otros argumentos. Y la mejor manera es pensar en ti, sólo en ti. Porque cada ruptura es genuina y única.
Y a veces nos esforzamos en comprender relaciones que sólo pueden entender sus protagonistas. A convertir una relación en un listado de tópicos, para poder ofrecer un consejo de manual. Ignorando las profundidades, sentimientos y singularidades que alberga cada relación humana. Mejor ni intentarlo.
Pero pienso en ti y encuentro que te puedo decir muchas cosas que este tiempo no te he dicho. Quizá menos típicas, menos efectistas, pero más sinceras. Porque tú no mereces tiritas, mereces que yo presione la herida contigo. Con fuerza. Juntos hasta que nos duela a los dos.
Puedo decirte que tengo una amiga maravillosa y que desde que te conocí me he sentido afortunado de tenerte en mi vida.
De demostrarme a mí mismo que no todo está hecho después de la Universidad en cuanto a la amistad.
Decían que los mejores amigos se hacen antes de los 25, y con nosotros se equivocaron. Porque apareciste después pero enseguida te ganaste un puesto en primera fila.
Decían que una amistad chico-chica no puede ser sincera y duradera.
Decían que en el trabajo sólo puedes encontrar “compañeros”
Decían muchas cosas, y se equivocaban.
Porque yo te encontré a ti.
Y me he sentido afortunado de escuchar tus consejos y de que sirvas de contrapunto a mi parte más loca.
De que me equilibres.
Porque la amistad también puede completar. Una buena amiga puede evitar el naufragio. Y tú has sido mi ancla. Cada vez que me he desviado un poco, sólo con pensar en ti me has inspirado para retomar el camino. Para encontrar mi mejor versión.
Has sido (eres) el contrapunto de mi vida, de mi barca. Cuando me dirigía hacia las rocas remaste conmigo para alejarnos. Cuando mi barca se hundía por estribor, te moviste hacia babor y la equilibraste. Porque siempre te has movido en la barca de mi vida hacia donde hacías falta. Porque velas para que mi barca no se hunda. Porque me acercas a la orilla cada vez que me alejo.
Y todo eso que consigues, no sólo conmigo sino con más gente a tu alrededor, te convierte en una persona especial que tendrá lo que quiera en la vida.
Lo que quieras. Te lo prometo.
Si quieres encontrar a otro chico, lo encontrarás. Porque todos nos fijamos en ti. Tu personalidad atrae desde el principio. Tus principios firmes pero tolerantes. Tu actitud sin contradicciones (¿hay algo más difícil?) Tu bondad y tu honestidad. Todo eso te convierte, en el mundo en que vivimos, en una mujer en peligro de extinción.
Añade que eres preciosa, y ya tenemos el pack completo.
Así que lo tienes todo para ser feliz. Y lo más importante, ganas de serlo e inteligencia para lograrlo.
Y tendrás a un chico bueno a tu lado si tú quieres encontrarlo. It’s up to you. No todo el mundo puede decir eso.
Pero hay más.
Si no quieres encontrarlo, serás feliz igualmente. Porque tienes la base, lo esencial, y lo demás es ruido de fondo.
Me gustaría que se pudiese apostar a tu felicidad a largo plazo. Pondría todo mi dinero en ti. Eres una apuesta segura porque no hay fisuras.
Así que te voy a acompañar estos meses. Un amor perdido duele, y no hay palabras que puedan solucionarlo de golpe. Pero sí acelerar la recuperación, y para eso puedes contar conmigo. Será un honor devolverte, por fin, un poco de todo lo mucho que tú me has dado.
Y cuando hayan pasado unos meses, volveré a ver la sonrisa en tu cara.
Y esto te habrá hecho más fuerte, estarás más preparada para las espinas de la vida, serás más madura, y finalmente serás más feliz de lo que lo habrías sido con esa persona a tu lado. Porque decidió irse él, así que te lo puso fácil. Recuerda lo que hablábamos de que es mejor que te dejen a dejar.
Quedarse con el dolor y no con la culpa. Porque lo primero pasa, lo segundo permanece.
He comenzado el post con una frase de una película que nos gusta. Y lo voy a terminar igual.
Los golpes que te da la vida duelen, pero te moldean para hacerte más perfecta. Así que hoy estás un paso más cerca de la perfección que ayer, y algún día agradecerás estos momentos. Saldrás reforzada y, si tú así lo decides, con alguien a tu lado.
Enfrentarás la vida con más ganas, más ilusión y más experiencia.
Y valorando lo realmente importante.
Mañana te veré. Y tú no sabrás que este post iba para ti. Porque no tienes ni idea de nada.
Pero yo me encargaré de ponerlo en práctica para ti. De no soltarte la mano.
De ser el contrapunto de tu barca.
Y ya sabes, el comentario que me dejas aquí abajo es tu regalo. Y siempre contesto. Siempre.
Hablaste a mi oído, erizandome la piel, acabas de presionar con tu pulgar en mi herida, aun sangra y duele… No se como lo haces, pero lo lograste, Te Metes en la piel del que te lee dando la sensacion de que estas respirandole en la espalda. No se quien eres… ni como llego a mi el mensaje.. pero gracias! creeme que te seguire